sábado, 4 de abril de 2009

DE SÓFOCLES A LUIS RAFAEL SÁNCHEZ Y OTRAS ANTÍGONAS: UN

CANTO A LA LIBERTAD

Profa. María Margarita Doncel

Universidad Interamericana de Puerto Rico – Ponce

 

¿Qué tienes Antígona que a todos hechizas con tu fuerza juvenil? ¿Por qué

subyugan tus verdades absolutas, tu toma de conciencia, tu libertad de acción?

¿Por qué a través del tiempo provocas la reflexión psicológica y poética? ¿Por qué

reapareces una y otra vez y te reactualizas en textos dramáticos?

 

George Steiner (1987) nos da la clave para entender su eternidad simbólica: " Sólo este texto literario presenta todas los constantes antagonismos propios de la condición del hombre. Cinco dicotomías o antinomias así lo representan: hombre-mujer; senectud-juventud; individuo-sociedad; vivos-muertos; y hombre-dios o dioses". En esta totalidad semántica se encuentra, sin duda, su riqueza significativa y la aparentemente inagotable posibilidad de contemporaneidad, de "llamarla a la vida". Así el texto clásico de Sófocles, se convierte en el hipotexto originario, fuente inagotable de reinterpretaciones, de hipertextos, que mantienen esencias intertextuales.

 

El argumento de Antígona, tragedia griega del siglo V, alude y se relaciona intrínsecamente con el mito de Edipo, presente en la literatura desde los tiempos homéricos, mencionado tanto en la Ilíada como en la Odisea. Sófocles convierte esta materia prima en el drama trágico Edipo Rey, el hombre en lucha contra su destino inexorable. Como consecuencia, los dioses castigan a todos los que violan sus designios: Yocasta se suicida, Edipo se arranca los ojos y sufre el destierro. Edipo abandona en Tebas a sus cuatro hijos producto del incesto: Eteocles, Polinices, Antígona e Ismene.


La tragedia Antígona continúa y da fin a la historia de esta familia maldita. Los dos hijos varones se enfrentan por el poder y se matan mutuamente en las afueras de Tebas. Creonte decreta que Eteocles se entierre con todos los honores que corresponden a los héroes patrios; mientras dispone que Polinices quede insepulto a merced de los buitres como símbolo de su traición y escarmiento de los tebanos. Esta ordenanza provoca el conflicto: Antígona propone enterrar el cadáver de Polinices; le pide ayuda a Ismene, quien no la acompaña por miedo a infligir las órdenes de Creonte. La protagonista efectúa el rito funeral en honor desu hermano, la aprehenden y conducen ante el autócrata. Éste la increpa por su

desobediencia y entre ambos se produce un diálogo, que va más allá de un simple interrogatorio judicial en torno al suceso, sino que contrapone dos ideologías: el choque de la ley natural, la piedad familiar de Antígona, con la voluntad personal y arbitraria del tirano. La heroína argumenta que su ley es aquella que los dioses tienen escrita en el espíritu del corazón del hombre, las cuales representan la

libertad de conciencia personal y la dignidad humana. El déspota ratifica la sentencia de muerte: el entierro en vida dentro de una cueva sobre una montaña. Creonte, guiado por Tiresias intenta cumplir con los designios divinos, llega muy  tarde y sufre las consecuencias: Antígona se ahorca, Hemón, prometido de la protagonista e hijo del Rey, se suicida y Eurídice, su esposa, hace lo propio cuando se entera de la muerte de su hijo. El hipotexto claramente adquiere una profunda significación religiosa: Hades determina los actos del hombre cónsonos con las leyes del estado.


 

Este mito adquiere una gran trascendencia, sobre todo a lo largo del siglo XX. Extensos debates se desarrollan en torno a las figuras protagónicas: Creonte, símbolo del poder, la ambición y la ciudad; Antígona, con su actitud desafiante,  refleja una inversión del rol asignado a la mujer que reta el sistema patriarcal y androcéntrico, quien representa el anhelo de paz, libertad y la lucha ante la opresión del tirano. Por tanto, esta heroína trágica se torna en musa de diversas ymúltiples versiones dramáticas que hacen hincapié en uno u otro de los aspecto señalados. Comentemos, pues, la significación y la intertextualidad entre la obra clásica y algunas Antígonas modernas.

 Antígona de Jean Anouilh (1944) se desarrolla en Francia durante la ocupación alemana en la II Guerra Mundial. Presenta la lucha entre el mundo de los puros y los corruptos, los primeros representados en la mayoría de los casos por jóvenes exigentes e intransigentes que se rebelan ante padres tiránicos y parásitos, de hombres de poder o portavoces de la fauna trivial de salones encopetados, de ambientes de teatro o de orquestas de café provinciano. La figura de Antígona se erige contra un mundo en completa decadencia, por eso entiende que su muerte constituye la actitud más digna; no sólo cumple con su "oikos", sus valores personales de enterrar a su hermano, sino mantiene la transparencia del ser en una sociedad corrupta donde entran en conflicto la ley divina con la terrenal. Anouilh presenta una nueva concepción del destino donde éste no se determina por la Parca, sino por las condiciones y funciones ejercidas en la sociedad. Él actualiza el mito desde esta perspectiva: el reflejo de los problemas cotidianos de un mundo donde la muerte es la única solución para evitar la corrupción humana.


 Referencias

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Brecht, Bertold. (1967). Antígona, Buenos Aires: Ediciones Nueva Visión.

Gambaro, Griselda. (1989). Antígona furiosa, Buenos Aires: Ediciones de la

Flor.

Konig, Irmtrud, Parodia y transculturación de Antígona furiosa de Griselda Gambaro, Revista Chilena de Literatura, Universidad de Chile.

Recuperado 22 de noviembre de 2003, de http://www/cuhile/cl/facultades/revista_literaria/articulos/revch6lik.htm

Llurba, Ana María, Antígona furiosa, ¿una voz femenina?, Gramma virtual. Recuperado 21 de noviembre de 2003, de

http://.salvador.edu.ar/ual-7-gramma-01-01-17.htm

Marechal, Leopoldo. (1981). Antígona Vélez, Buenos Aires: Ediciones Colihue.

Sánchez, Luis Rafael, (1968). La pasión según Antígona Pérez, San Juan: Puerto Rico, Editorial Cultural.

Solari Alliende, Enzo, Antígona o el poder de lo real., Recuperado el 20 de noviembre de 2003, de http://www.geocities.com/teologialatina

Vilanova, Ángel, (1993), Motivo clásico y novela latinoamericana, Mérida, Venezuela: Ediciones Solar. (1995) 

Las Antígonas iberoamericanas: nuevasaproximaciones al análisis de Antígona Pérez de Leopoldo Marechal; Pedreria das almas de Jorge Andrade; La pasión según Antígona, de Luis Rafael Sánchez y Antígona furiosa de Griselda Gambaro, Mérida, Venezuela, Universidad de los Andes.

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